DISCLAIMER: La siguiente historia es una obra basada e inspirada en procedimientos y eventos técnicos del rubro aeronáutico. No refleja nombres reales, y algunos datos han sido modificados por razones de anonimato. Cualquier similitud con personas, aeronaves o eventos específicos es mera coincidencia.
Postpandemia, agosto de 2021.
Lo que comenzó como un procedimiento técnico rutinario, requerido tras trabajos mayores en sistemas críticos, se transformó en una experiencia que puso a prueba no solo los sistemas de la aeronave Boeing CL301, sino también nuestra capacidad como equipo multidisciplinario.
El vuelo, destinado a validar la operatividad de los sistemas de sangrado y aire acondicionado, reveló fallas mecánicas inesperadas que desencadenaron una serie de decisiones estratégicas, diagnósticos en tiempo real y maniobras precisas. Fue un ejercicio de resiliencia, coordinación y aprendizaje técnico en condiciones reales.
Una Mañana de Expectativa y Contratiempos

La jornada comenzó con retrasos logísticos que comprometieron el margen operativo previo al despegue. La llegada al aeropuerto se produjo apenas 10 minutos antes de la hora programada (05:30 am), lo cual evidenció la falta de sincronización entre áreas operativas, mantenimiento y planificación comercial.
Este contratiempo inicial dio lugar a una reflexión crítica sobre la viabilidad de programar vuelos de prueba entre las 03:00 y 05:00 am. Aunque se buscaba evitar tráfico aéreo, no se consideraron debidamente los límites del duty time del personal técnico y tripulante.
Ya en la pista, los primeros rayos del sol bañaban el fuselaje del 300CL, símbolo de la aviación regional. El ambiente cambió. Sabíamos que, más allá de ser un trámite legal, esta era una oportunidad para validar procedimientos y demostrar sincronización operativa real.
El Despegue: Belleza Visual, Precisión Operativa

A las 05:55 am, el 300CL despegó con elegancia. Desde la cabina, el espectáculo visual de un cielo naciente sobre un mar de nubes trajo una breve pausa emocional, antes de adentrarnos en el verdadero objetivo: la evaluación técnica.
Se comenzaron a revisar las configuraciones normales, alternas y manuales de los sistemas críticos, especialmente el sistema de sangrado de motores y su influencia en el aire acondicionado y la presurización. Todo marchaba conforme al plan, hasta que se activó el modo de un solo PACK.
El Desafío: Falla en el Sangrado del Motor Izquierdo
Durante la transición al modo de un solo PACK, el sistema de sangrado del motor izquierdo (L engine bleed) no respondió: permanecía cerrado. Adicionalmente, el PACK izquierdo presentó resistencia al iniciar operaciones. Esto implicaba un riesgo significativo de pérdida de presurización.
La tripulación, acompañada de técnicos embarcados, actuó con profesionalismo. Se ajustaron altitudes de vuelo entre 16,000 y 19,000 pies MSL para mantener un MSA seguro, mientras el equipo técnico analizaba en tiempo real el comportamiento del sistema neumático. Se sospechó de fallas en las válvulas de sangrado y del PACK, posiblemente mal reinstaladas tras el mantenimiento mayor.

Se redirigió el vuelo hacia el waypoint NIKAT, ubicado a 26 NM al suroeste del aeropuerto base, una zona con menor altitud de terreno y márgenes de seguridad adecuados para completar las pruebas.
Pruebas Finales: Despresurización Controlada y Evaluación Crítica

Durante el descenso hacia el FAF en la aproximación VOR, se simuló una despresurización controlada para evaluar el despliegue de las máscaras de oxígeno. Si bien la mayoría de los PSU se activaron correctamente, se detectaron fallas localizadas, previamente reportadas, que evidenciaban necesidad de ajustes adicionales.

Fue una experiencia impactante, especialmente para los técnicos que por primera vez vivieron una situación de despresurización en vuelo. El ejercicio fortaleció la empatía entre áreas operativas y técnicas, reforzando la importancia de reportes diligentes y adherencia estricta al MEL.
Conclusiones Técnicas y Lecciones Operativas
Al concluir el vuelo, el informe fue claro:
- Reemplazo urgente de válvulas en el sistema de sangrado y el PACK izquierdo.
- Imposibilidad de liberar la aeronave hasta concluir las correcciones y nuevas pruebas.
- Se evidenció una planificación apresurada por parte del área comercial, que ya había reasignado la aeronave sin validar su disponibilidad técnica.
Lecciones Aprendidas:
- Planificación Integral: Los horarios de prueba deben considerar duty time, condiciones operativas y coordinación entre áreas.
- Comunicación Multidisciplinaria: La falta de alineación entre planificación y mantenimiento genera riesgos.
- Empatía Técnica: Vivir el vuelo desde dentro brinda comprensión y compromiso más profundo con la seguridad.
Reflexión Final

Este vuelo fue más que una validación técnica. Fue una experiencia formativa, humana y profesional. Nos recordó que cada fallo, por mínimo que sea, representa una oportunidad para elevar nuestros estándares.
En aviación, como en la vida, la excelencia se construye en los detalles, la preparación y la capacidad de responder con inteligencia emocional ante la adversidad.
Siempre más alto, siempre más seguros.
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